En este capítulo queremos explicar y mostrar históricamente, cómo los precios de los metales preciosos cambiaron de acuerdo con incidentes específicos como la escasez o el comienzo de los modales comerciales especulativos.
El oro y la plata son probablemente las inversiones más antiguas de todas. Estos metales preciosos impulsaron el comercio en la antigüedad y se usaron como dinero. Su valor se deriva de su rareza y durabilidad.
La historia de estos dos metales muestra que la oferta y la demanda de metales raros pueden generar grandes saltos de precios y que su valor de inversión está sujeto a una alta volatilidad. Uno por uno, la ciencia descubrió más metales preciosos. Los ocho han sido descubiertos y se utilizan en una amplia variedad de industrias. Sin embargo, el comercio con estos metales progresó en pequeños pasos, metal por metal. El paladio se hizo conocido en el mercado de inversión como el tercer metal precioso y se vendió en lingotes.
Mirando la tabla periódica, al lado estaba el platino. Dado que su rigidez de flexión especial permitía formas de anillos especiales que no se podían lograr con los metales blandos de oro y plata, el platino se estableció rápidamente en el mercado de la joyería. Todos han visto un anillo de platino donde el diamante engastado es tocado ligeramente por los dos extremos del anillo. Los mercados se hicieron cada vez más estrechos de metal a metal. La mayoría de los metales de platino se encuentran en grandes cantidades en el comercio mundial y son relativamente fáciles de reciclar, lo que los mantiene disponibles para diversas aplicaciones. Comparemos las entradas de mercado de los diferentes metales en los gráficos históricos a continuación:
Al investigar el paladio, vemos su entrada en el mercado alrededor de 1974, que es seguida poco después por la del platino alrededor de 1980. Cada entrada en el mercado de un metal "nuevo" fue seguida por una serie de efectos secundarios. Lo más importante a tener en cuenta es que cada entrada en el mercado tenía en común un pico inicial, seguido de la consolidación y la posterior estabilización del mercado con un crecimiento moderado. Cuanto más raros eran los metales preciosos, más extremas se volvieron las reacciones del mercado.