Jerome Powell, presidente de los Bancos de la Reserva Federal, pasará los próximos tres días respondiendo a los electos en Washington.
A partir de mañana por la mañana, luego el miércoles, para concluir el jueves con la presidencia del Comité Bancario del Senado por el Sr. Crapo
Eso sigue al discurso del jueves pasado que tuvo una mala reacción del mercado porque básicamente dijo que no hay nada que pueda hacer por la calle principal.
No puede dirigirse a diferentes grupos. No puede ordenar a los bancos que transfieran estas tasas de interés del cero por ciento. Solo pueden otorgar préstamos a empresas solventes. Les gusta hacer buenos préstamos. Y el clásico: esta es la ley.
La constitución de los Estados Unidos dice que solo el oro y la plata pueden ser de curso legal, lo que demuestra que hay muchas leyes que uno puede elegir según su verdadera intención.
Su verdadera intención prestarle al gobierno es muy rentable porque sabes que lo devolverán, así que básicamente es dinero gratis para los bancos que obtienen el 6% de las ganancias de la Fed.
Como dice Powell, incluso explícitamente, argumentando que apuntar a diferentes grupos o abordar la desigualdad y el resto es para Trump, no para Powell.
Eso se debe a que Powell dice que tiene que pasar por los bancos que obtienen unos 120.000 millones de dólares al mes, unos 80.000 millones de dólares en bonos y 40.000 millones de dólares en la compra de hipotecas empaquetadas. [19659002] Los bancos, por lo tanto, deben estar obteniendo una gran cantidad de beneficios, ya que obtienen un recorte tomando préstamos a bajo precio y prestando un poco menos barato en lo que respecta al gobierno.
En lo que respecta a la economía real, pedir prestado es casi imposible para ma ny, y las tasas de interés suelen ser muy altas, ciertamente en comparación con el casi cero por ciento que cobran a los bancos.
Si todo este dinero no fluye hacia la economía, entonces los problemas temporales pueden agravarse, de ahí ahora este interrogatorio. [19659002] El secretario del Tesoro, Steven Muchin, estará con él, por lo que los dos hombres más poderosos del país después de Trump en lo que respecta a la economía, ahora deben explicar cómo planean hacer que el motor vuelva a funcionar para un crecimiento estable.
A tarea difícil e imposible si vuelven a cerrar la economía, y no está claro si lograrán tranquilizar al mercado de que tienen un plan y que no se han quedado sin municiones.