Al igual que con todas las transferencias de dinero, las transacciones enviadas desde la mayoría de las carteras criptográficas implican algunas tarifas.
Si bien no hay costos por recibir transacciones, debe pagar tarifas de red a los mineros o validadores para procesar las transferencias salientes.
Las carteras criptográficas sin custodia utilizan tarifas de red variables, lo que significa que los costos que paga dependen de qué tan cargada esté la cadena de bloques. Cuanto más congestionada esté una red, mayores serán las tarifas que pague por las transacciones en criptomonedas.
Por otro lado, las billeteras con custodia (por ejemplo, cuentas de cambio centralizadas) utilizan tarifas fijas que a menudo son más altas que sus contrapartes sin custodia.
Si bien muchas soluciones de billetera permiten a los usuarios establecer sus propias tarifas para las transferencias salientes, otras han introducido transacciones gratuitas en las que el proveedor de servicios cubre las tarifas de la red de los usuarios.
Sin embargo, si la red se congestiona, es probable que estos últimos proveedores de servicios (re) introduzcan tarifas para seguir siendo rentables.